Un
hombre rico
le entregó una canasta con basura
a un hombre pobre.
El
hombre pobre sonrió
y corrió con la canasta,
la vació, la lavó y la
llenó de flores
y se la dio de regreso...
El hombre rico se asombró y le
preguntó...
¿Por qué me has dado flores, si yo te di basura?
el hombre
pobre respondió:
Porque cada uno da,