Cada vez que te entren dudas respecto a dónde eres capaz de llegar, simplemente recuerda hasta dónde llegaste. Recuerda todo lo que enfrentaste, todas las batallas que ganaste y todos los miedos que superaste.
Recuerda siempre tus tropiezos y la fuerza cómo te levantaste. Recuerda cuando todo parecía imposible y con fe y esfuerzo lo lograste. Recuerda tus lágrimas de impotencia, y la alegría al vencer el reto. Cada vez que te entren dudas, mira dentro de ti y encontrarás la fuerza que te hizo salir adelante y superarte.
Oly Sawyer