** Nuestros cuerpos envejecen, pero nuestro amor no tiene por qué terminar.

Este marido estaba ayudando a su esposa a elegir un maquillaje que fuera perfecto para su tono de piel.  Ella estaba tan preocupada tratando de encontrar el mejor para ella, y él estaba intentando serle extremadamente útil.  Ella estaba pasando por un momento "femenino"en el que entran las mujeres en pánico tratando de encontrar el color perfecto para ellas.

Él la calmó y por supuesto la ayudó a encontrar el color, y al final, la besó en la frente.

Fue una simple manera de demostrar cuán grande era su amor por ella. 

Ésta es una manera y ejemplo perfecto para demostrar que nuestros cuerpos envejecen, pero nuestro amor no tiene por qué terminar.

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